OPINIÓN

Claudia y la continuidad

Carlos Bravo Regidor EN REFORMA

3 MIN 30 SEG

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La candidatura de Claudia Sheinbaum no se basa en la posibilidad de proponer un diagnóstico honesto del país sino en la necesidad política de defender el legado de López Obrador. Para bien y para mal, la exjefa de Gobierno es el rostro del obradorismo en la boleta del 2024. Eso la beneficia por la intención de voto que aglutina Morena (51%) y el nivel de aprobación que tiene el Presidente (62%), así como por la percepción mayoritaria de que él ha cumplido (60%), de que ella tiene su respaldo (47%), y de que la coalición Morena-PVEM-PT es la más fuerte (63%).* La perjudica, sin embargo, porque le impone una camisa de fuerza que le impide habérselas con la realidad de los saldos negativos que deja este sexenio en materias muy sensibles como la educación, las finanzas públicas, la corrupción y, sobre todo, el militarismo, la salud y la violencia. Xóchitl Gálvez tiene más margen de maniobra para reconocer lo que el actual gobierno ha hecho bien que Claudia Sheinbaum para admitir lo que ha hecho mal.