En la vida hay que elegir, nadie escapa de esa crueldad dictatorial. Así que hoy he elegido pronunciarme del lado de los alarmistas que decimos fuerte y claro que estamos propiciando una epidemia de idiotas. No crean que me considero fuera de la epidemia, no no, yo la que más. Hay suficientes datos científicos para encender las alarmas. Es preocupación prioritaria de la UNESCO el deterioro cognitivo generacional por el uso de dispositivos digitales. Ya no es sólo el asunto de trastornos emocionales (depresión, ansiedad) sino que los cerebros de todos -especialmente los más jóvenes- están perdiendo la capacidad de aprender.
Es escritora, autora de los libros Cuentos de maldad (y uno que otro maldito) y El niño que fuimos bajo el sello de Alfaguara; Las noches habitadas (Editorial Planeta) y Damas de caza (Editorial Plaza y Valdés). Ha colaborado en El Cultural de La Razón, The Washington Post, SinEmbargoMx, El Malpensante, Confabulario de El Universal, Revista GQ, Revista SOHO y otros medios. Desarrolla guiones para cine, teleseries y audioseries.