México ha tenido excelentes cancilleres con amplia experiencia en asuntos internacionales, como Bernardo Sepúlveda o Rosario Green. La segunda Presidencia de Trump nos agarra muy mal parados. El actual canciller se nota rebasado por su falta de experiencia en la materia, y ahora tenemos cónsules cuyo único mérito ha sido ser amigos de AMLO, como Rutilio Escandón, ex gobernador de Chiapas, que dejó al estado hecho un desastre y ahora se desempeña (es un decir) como cónsul en Miami.