Baptiste Lormand
Guadalupe Loaeza EN REFORMA
Su nombre completo era Baptiste Jacques Daniel Lormand, de 45 años, padre de dos hijos pequeños, con 1.92 metros de altura, y un peso de 93 kilos, todo el mundo lo llama de cariño, "Bat", quien llegara a México hace 22 años. Cuentan sus amigos más entrañables, con los que he hablado para darles mi más sentido pésame, que era "una súper buena persona". Llama la atención cómo coinciden todos al describirlo: "buen papá", "generoso con sus amigos", "buen hombre", "muy noble", etc. etc. Algunos de ellos, optaron por escribirme su opinión alrededor de esta "figura emblemática de Polanquito", que va desde Emilio Castelar hasta Masaryk: "Conocía ese cuate. Bien simpático. Creo que fue extorsión. País sin ley ni nada... cada día más bananero...". Uno de sus amigos más consternados, escribió: "Me entristece y me aterra ver la desaforada violencia en México. Nadie está a salvo. En México, los criminales campean a sus anchas y controlan política y negocios. No es posible hacer ni lo uno ni lo otro sin jugarse la vida... Qué dolor y qué impotencia".
Descubrió quién es gracias a la escritura y al periodismo. Ha publicado 43 libros. Se considera de izquierda aunque muchos la crean "niña bien". Cuando muera quiere que la vistan con un huipil y le pongan su medalla de la Legión de Honor; que la mitad de sus cenizas quede en el Sena y la otra mitad, en el cementerio de Jamiltepec, Oaxaca, donde descansan sus antepasados. Sus verdaderos afectos son su marido, sus hijos, sus nietos, sus amigos y sus lectores