El presidente del Fed estadounidense, Jerome Powell, confirmó la semana pasada que dicha institución reducirá la tasa de interés de los fondos federales al menos en un cuarto de punto porcentual en la reunión de este 30 y 31 de julio. Esta medida será una bendición para el Banco de México al facilitarle la posibilidad de reducir la tasa de referencia sin correr el riesgo de una fuga de capitales, que al parecer es uno de sus principales temores.