Los aserraderos son instalados y desmontados por las noches, por cinco grupos de talamontes, el más fuerte en Huitzilac, y por ahora fueron desmantelados los que operaban en Tlalpan y Milpa Alta. Crédito: Especial
Para evitar su comercialización como madera fueros asegurados mil 230 troncos de árboles talados, 2 mil 012 tablas; 2 mil 600 piezas en escuadría, 2 mil 600 polines y 4 mil barrotes en rollo. Crédito: Especial