OPINIÓN

"Aquí ha de ser. Vamos, a morir".

LA OTRA HISTORIA DE MÉXICO / Catón EN REFORMA

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Al pasar el carruaje frente al Santuario de Guadalupe se arrodilló Morelos con gran dificultad a causa de los grilletes que llevaba en los pies y también por lo estrecho del interior, en que además iban el padre Salazar y un oficial. Se hincó, de cualquier modo, e inclinando la cabeza se encomendó devotamente a la Guadalupana.