Clotilde Jiménez (Honolulú, Hawái, 1990) llegó al País desde Londres, ciudad que decidió abandonar con su familia ante la incertidumbre política y económica del Brexit.
De verse obligado a constreñir su obra a los formatos discretos y compactos que le permitía su diminuto estudio en Londres, Jiménez ahora puede crear a sus anchas.
Sus cuadros, bocetos y dibujos ocupan ahora las paredes del segundo piso del Edificio Woodrow, una construcción art decó del arquitecto Albert Pepper en el Centro Histórico.
Con su obra artística, Clotilde Jiménez explora desde el collage a los cuerpos, cultura e imágenes propias de la afrodescendencia.
La técnica a la que dedica la mayor parte de sus esfuerzos, el collage, surgió cuando, al egresar del Instituto de Arte Cleveland, tenía pocos recursos para comprar materiales de pintura.
"Me encontré con que no tenía nada de materiales, de papeles, entonces en vez de hacer nada y dejarme vencer, tuve tres diferentes trabajos y puse mi estudio", recuerda el artista.
En algunas de sus obras, utiliza poses o escenarios reminiscentes a los de grandes maestros del arte europeo e intercambia a los sujetos por personas de origen africano.
"Me siento muy bendecido", dice Clotilde Jiménez frente a un ventanal con el que domina todo el Centro Histórico de la Ciudad de México.
"Soy Clotilde Jiménez, vivo acá con ustedes y vengan a ver lo que hago", invita el artista.