En un encuentro realizado el pasado 12 de noviembre con la comunidad judía y empresarios, Alfonso Romo, futuro jefe de la Oficina de la Presidencia, reconoció la "pérdida de confianza fuerte" por la cancelación mediante consulta del proyecto del Nuevo Aeropuerto de Internacional de México (NAIM). En el mismo, calificó de "tropezón" la iniciativa del Senador Ricardo Monreal para limitar las comisiones bancarias. Cerró señalando que "de aquí en adelante (están...) decididos a (re)conquistar la confianza de todos los inversionistas" (https://bit.ly/2BhCB6V). Menos mal que Romo tiene capacidad de reconocer estos errores, su consecuencia y buscar enmendarlos. La pregunta es ¿Y su jefe también?