La otra cara del mezcal
Ángel Rivas
(31 diciembre 2015) .-10:56 hrs
Si quieres terminar el año con una bebida nacional suave, sutil al paladar y de buena calidad apuesta por el mezcal. No es un error, aunque muchos mezcales tienen la marcada nota intensa de ahumado, en Zacatecas se encuentran versiones que distan de las de otras regiones.
"La gente piensa que es una bebida muy fuerte y los mezcales de Zacatecas son lo opuesto, son refinados y suaves, y eso permite que un mayor número de personas lo puedan adoptar", señaló Juan Pablo González, fundador del mezcal Miel de Tierra.
"Los mezcales del sur (Oaxaca, por ejemplo) son más como de regalo y no se pueden consumir siempre porque son más fuertes, aunque no son malos. Utilizamos el agave weber que es el mismo del tequila, pero el proceso y la región son diferentes; el mezcal se produce desde hace 400 años en la región de Jalpa".
La gente piensa que el mezcal se empezó a producir en Oaxaca, pero se empieza a producir en el centro del País con el arribo de la destilación y en centros mineros, agregó.
Hay diferencias entre los dos destilados. El tequila puede ser de menos de 100 por ciento agave y el mezcal no. El mezcal tiene que ser envasado de origen y el tequila no.
Debido a este suave sabor, puede ser una propuesta mexicana para despedir el 2015 y recibir el 2016.
"Nuestro reposado ganó como el mejor destilado del año en el San Diego International Wine & Spirits Challenge del 2014. Obtuvo doble medalla de oro y ganó a otros destilados como whiskys o rones", mencionó.
Tanto el joven como el reposado se sugieren tomar solos y a temperatura ambiente, porque debido a lo suave de su sabor el frío reduce esos atributos. La manera local de acompañarlos no es con naranjas, sino con guayaba, fruto que está de temporada.