OPINIÓN

Ante la Esfinge

Juan Villoro EN REFORMA

4 MIN 00 SEG

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La mitología griega demostró que nada es tan letal como una pregunta sin respuesta. La Esfinge destruía con un enigma. Llegó a Tebas para plantear su acertijo y devorar a quienes no pudieran resolverlo. Con la valentía de quien ignora su destino, Edipo decidió hacerle frente. Carlos García Gual describe así el enfrentamiento: "No es un combate feroz [...] El monstruo no usa sus leoninas garras, ni tampoco su canto seductor y acaso mortífero para asustar al joven viajero. Ni sus encantos femeninos para hechizarlo". En vez de atacar, la Esfinge interroga: ¿qué criatura camina en la mañana en cuatro patas, al mediodía en dos y al atardecer en tres? Edipo da con la respuesta que lo hará rey: se trata del ser humano, que primero gatea, luego camina y en la vejez requiere de un bastón.