Advierte CEESP que, de persistir la baja actividad productiva y la insuficiente inversión, podría presentarse una inestabilidad macroeconómica. Crédito: Archivo
La tendencia de la actividad económica en México es claramente descendente y no puede atribuirse a factores temporales, por lo cual es imprescindible que se tomen medidas efectivas a la brevedad para evitar el riesgo de recesión.