De acuerdo con los resultados de la Medición Multidimensional de la Pobreza 2018-2020, realizada por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), el porcentaje de la población nacional con carencia de acceso a servicios de salud en México pasó de 16.2% (20.1 millones) en 2018 a 28.2% (35.7 millones) en 2020. Esto significa que hubo un aumento de 15.6 millones de personas que declararon "no estar afiliadas, inscritas o tener derecho a recibir servicios de salud en una institución pública o privada". La reducción de la cobertura afectó sobre todo a la población que vive en situación de pobreza extrema. En dicho grupo, el porcentaje de personas desprotegidas se duplicó, al pasar de 25.6% a 57.3% en ese mismo periodo. Tales cifras indican que más de la mitad de la población más pobre de este país carece de acceso regular a servicios de salud. Para colmo, esta caída sin precedentes se produjo en medio de una pandemia que incrementó considerablemente las necesidades de salud.