Los resultados de las elecciones recientes en México frenaron las tendencias restauradoras y al mismo tiempo fortalecieron el bipartidismo. El PAN, con y sin alianzas con el PRD, derrotó al PRI en siete estados. Como era de esperarse, el presidente del PRI renunció, pues fue visto como el responsable del gran retroceso de su partido. A la derrota del PRI también contribuyó el dirigente del PRD, quien impulsó decididamente las alianzas con el PAN, pero paradójicamente también tuvo que renunciar. Manlio Fabio Beltrones, a pesar de su habilidad como negociador, cultivaba el viejo estilo priista de hacer política, un estilo que cada vez da peores resultados. En cambio, Agustín Basave era el representante en la izquierda de las opciones socialdemócratas más modernas, pero las fracturas internas del PRD no le permitieron dirigir a su partido hacia nuevas opciones.
Antropólogo y sociólogo, doctorado en la Sorbona de París, investigador emérito de la UNAM, ex director de La Jornada Semanal, miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, investigador honorario de Birkbeck (Universidad de Londres). Autor de La jaula de la melancolía, Las redes imaginarias del poder político, El mito del salvaje, La sombra del futuro, Territorios del terror y la otredad y La sangre y la tinta: reflexiones sobre la condición postmexicana.