Ponen casa al 'Niño guerrero'
Daniel Melchor
Cd. de México (20 febrero 2015) .-00:00 hrs
El "Niño guerrero", de dos meses, que se recupera en Galveston, Texas, tras el estallido del hospital de Cuajimalpa, tendrá casa nueva.
La constructora Grupo Heken regalará a la familia de José Ángel García una vivienda de 100 metros cuadrados en Chicoloapan, Estado de México.
El bebé sufrió quemaduras en el 30 por ciento de su cuerpo y tuvo que ser trasladado al Hospital Shriners, en Galveston, donde se ganó el apodo por parte de los médicos del "Niño guerrero", debido a su pronta recuperación.
La familia vive en un cuarto en la Colonia Loma del Padre, en Cuajimalpa.
Tras enterarse de ello, Patricia Mendoza, socia mayoritaria de Heken, decidió obsequiarle una casa y sólo pidió a la Delegación que donara un terreno, pero le dijeron que eso debía verlo con el GDF.
Ante esto, Carolina Charbel, hija de Mendoza, decidió regalar el predio.
"Decidí donarlo cuando vi que las autoridades no se hacían cargo, yo pensé que Adrián (Rubalcava) iba a responder en su calidad de Delegado. Está muy canijo cómo viven", contó Carolina.
"Me pareció muy lamentable las condiciones en las que vive la familia".
En entrevista vía telefónica, Sonia García señaló que ni el Jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera ni el Delegado Adrián Ruvalcaba han hablado con ella para ofrecerle ayuda.
Sin embargo, dijo, la mejoría que presenta el bebé es lo más importante.
Tras el rechazo, Lorena -tía del bebé y quién solicitó el apoyo a Salazar- señaló que ahora sólo tienen que agradecer a Grupo Heken y a la familia Mendoza.
Karime Marroquín, coordinadora del proyecto por parte de Heken, refirió que la obra tardará un mes.
Para Sonia García, madre del bebé José Ángel, es difícil creer lo que la iniciativa privada ha hecho por su hijo y su familia.
Primero, como las quemaduras de segundo grado que hirieron al bebé de dos meses en 30 por ciento de su cuerpo no eran posible tratarlas en México, la Fundación Michou y Mau ayudó a su traslado a Galveston.
"Ya me llegó la noticia (de la casa). Estamos así como pensando si es verdadero o un sueño.", relató Sonia en entrevista vía telefónica.
"Estoy muy contenta y más por mi hija y por mis nietos. Se los agradezco mucho (a la empresa). Nada más falta platicarle a Santiago, que ya entiende bien las cosas", expresó Rosa María, la abuela, tras recibir la noticia.
Por lo pronto, los dos hermanos, la mamá y la abuela del "Niño guerrero" se deben acomodar en un cuarto de servicio, donde sólo cabe una cama individual y un viejo televisor.
El espacio está atiborrado de pañales, prendas y cobijas, y con tablas de madera en el techo improvisan una especie de litera.