NACIONAL
Fracasan en pruebas aspirantes a jueces
Abel Barajas y Víctor Fuentes
Cd. de México (04 septiembre 2014) .-00:00 hrs
El intento para designar a los primeros 50 jueces federales encargados del nuevo sistema penal acusatorio fracasó.
Sólo 5 de los mil 221 aspirantes admitidos al concurso del Consejo de la Judicatura Federal lograron pasar la primera ronda del examen, un cuestionario aplicado el lunes pasado, informaron funcionarios judiciales.
Los concursantes eran secretarios de juzgados y tribunales experimentados, pues era requisito una antigüedad de cuando menos 5 años en una o varias categorías de la carrera judicial.
El concurso era para jueces de control, que intervienen desde el inicio del procedimiento hasta el dictado de apertura de juicio, y para jueces de tribunal de enjuiciamiento, que llevan el proceso oral y dictan sentencia.
El concurso para jueces de distrito especializados en el nuevo sistema penal acusatorio planteó preguntas sobre temas ajenos a los procedimientos penales y privilegió la memorización de datos, criticaron algunos de los concursantes.
Este es el concurso con el índice de aprobación más bajo de los últimos años en el Consejo de la Judicatura Federal.
Los cuestionamientos no se hicieron esperar entre aquellos que no lograron la calificación mínima de 85 puntos, de un total de 100, para alcanzar la segunda etapa de examinación.
Una de las críticas fue a los reactivos sobre principios de derecho penal y derechos humanos, pues según datos recabados entre los participantes, se hicieron preguntas como cuáles eran los motivos por lo que se negaba el asilo político.
El asilo, además de que compete al Ejecutivo federal a través de la Cancillería, no es de materia penal, sino administrativa, y los litigios sobre este tema son mínimos, dijeron algunos de los entrevistados.
"El examen tenía faltas de ortografía, escribieron orden de aprehensión sin 'h'; las respuestas no eran acordes con la pregunta, por ejemplo se preguntaba sobre criterios jurisprudenciales en los que sólo se mencionaba el número de la jurisprudencia, como la 17/2008.
"Sólo había 40 preguntas del Código Nacional de Procedimientos Penales, cuando es realmente lo que se tenía que estudiar; había preguntas en las que se pedía que indicáramos la pena de un delito, si era de 1 a 6 o 2 a 7 años de cárcel. ¡Habría que memorizar todas las penas!", dijo uno de los participantes.
Pese al reducido número de aprobados, la Judicatura decidió proseguir a partir de hoy con el curso de inducción de un mes, previo a la segunda etapa de examinación, que comprende la solución de un caso práctico.
Aparentemente se sumarán aspirantes de cursos previos y que obtuvieron calificación aprobatoria en la primera fase.
La semana pasada, la Judicatura declaró desierto otro concurso, éste para designar 25 jueces mixtos, luego de que sólo 2 de los 53 participantes superó la primera etapa. Todos eran secretarios de Ministros de la Suprema Corte y la Sala Superior del Tribunal Electoral.
En 2012, dos concursos fueron cancelados por irregularidades del Instituto de la Judicatura Federal en la revisión de exámenes, mientras que en 2013, el examen fue calificado con base en una respuesta equivocada, lo que provocó múltiples reclamos ante la Corte.
Sólo 5 de los mil 221 aspirantes admitidos al concurso del Consejo de la Judicatura Federal lograron pasar la primera ronda del examen, un cuestionario aplicado el lunes pasado, informaron funcionarios judiciales.
Los concursantes eran secretarios de juzgados y tribunales experimentados, pues era requisito una antigüedad de cuando menos 5 años en una o varias categorías de la carrera judicial.
El concurso era para jueces de control, que intervienen desde el inicio del procedimiento hasta el dictado de apertura de juicio, y para jueces de tribunal de enjuiciamiento, que llevan el proceso oral y dictan sentencia.
El concurso para jueces de distrito especializados en el nuevo sistema penal acusatorio planteó preguntas sobre temas ajenos a los procedimientos penales y privilegió la memorización de datos, criticaron algunos de los concursantes.
Este es el concurso con el índice de aprobación más bajo de los últimos años en el Consejo de la Judicatura Federal.
Los cuestionamientos no se hicieron esperar entre aquellos que no lograron la calificación mínima de 85 puntos, de un total de 100, para alcanzar la segunda etapa de examinación.
Una de las críticas fue a los reactivos sobre principios de derecho penal y derechos humanos, pues según datos recabados entre los participantes, se hicieron preguntas como cuáles eran los motivos por lo que se negaba el asilo político.
El asilo, además de que compete al Ejecutivo federal a través de la Cancillería, no es de materia penal, sino administrativa, y los litigios sobre este tema son mínimos, dijeron algunos de los entrevistados.
"El examen tenía faltas de ortografía, escribieron orden de aprehensión sin 'h'; las respuestas no eran acordes con la pregunta, por ejemplo se preguntaba sobre criterios jurisprudenciales en los que sólo se mencionaba el número de la jurisprudencia, como la 17/2008.
"Sólo había 40 preguntas del Código Nacional de Procedimientos Penales, cuando es realmente lo que se tenía que estudiar; había preguntas en las que se pedía que indicáramos la pena de un delito, si era de 1 a 6 o 2 a 7 años de cárcel. ¡Habría que memorizar todas las penas!", dijo uno de los participantes.
Pese al reducido número de aprobados, la Judicatura decidió proseguir a partir de hoy con el curso de inducción de un mes, previo a la segunda etapa de examinación, que comprende la solución de un caso práctico.
Aparentemente se sumarán aspirantes de cursos previos y que obtuvieron calificación aprobatoria en la primera fase.
La semana pasada, la Judicatura declaró desierto otro concurso, éste para designar 25 jueces mixtos, luego de que sólo 2 de los 53 participantes superó la primera etapa. Todos eran secretarios de Ministros de la Suprema Corte y la Sala Superior del Tribunal Electoral.
En 2012, dos concursos fueron cancelados por irregularidades del Instituto de la Judicatura Federal en la revisión de exámenes, mientras que en 2013, el examen fue calificado con base en una respuesta equivocada, lo que provocó múltiples reclamos ante la Corte.
