Disputan cárteles control de Sinaloa
Benito Jiménez y Abel Barajas
(18 junio 2016) .-00:00 hrs
La violencia en Sinaloa de los últimos días responde a una guerra entre grupos rivales por el control de la zona conocida como Triángulo Dorado y de ciudades como Culiacán y Mazatlán, afirmaron fuentes oficiales.
La batalla la protagonizan, por un lado, familiares del capo Joaquín "El Chapo" Guzmán encabezados por Aureliano Guzmán, "El Guano", y, por el otro, Isidro Meza Flores, "El Chapito", quien intenta liderar la organización por lo menos desde 2012.
Meza Flores -considerado como operador de los Beltrán Leyva- estuvo al frente de los 150 hombres armados que esta semana incursionaron en las comunidades de La Palma, Huixopa, Puerto la Esperanza, El Nogalito, Arroyo Seco y La Tuna, donde vive la madre de "El Chapo", de acuerdo con las fuentes consultadas.
Ayer, el subprocurador de Justicia estatal, Martín Robles Armenta, reconoció que hay una disputa entre grupos criminales por el cultivo de drogas y el control de la zona para llevar a cabo actividades ilícitas.
La sierra de Badiraguato es la principal zona productora de mariguana y goma de opio del Cártel de Sinaloa. Además, es clave para el paso de cocaína hacia Estados Unidos.
Otras fuentes del Gobierno federal indicaron que la familia de "El Chapo" se ha dividido tras conocer la versión de que el asesinato de Ernesto Guzmán Hidalgo, en abril de 2015 en Badiraguato, fue ordenado por "El Guano", es decir que el hermano del capo ordenó la ejecución de su medio hermano.
Los funcionarios consultados dijeron que esta disputa está detrás de la incursión de los hombres de Meza Flores en La Tuna, cuyo propósito era vengar el asesinato de Guzmán Hidalgo.
El hecho habría desatado choques con un saldo de al menos una decena de muertos, de acuerdo con información recopilada por militares y autoridades locales.
Más de mil personas han abandonado sus casas esta semana en esas comunidades, aseguraron fuentes del Ayuntamiento de Badiraguato.
El jueves pasado, en medio de la crisis de violencia, fueron hallados siete cuerpos decapitados y desmembrados en Rosarito, en la sierra sinaloense.
Ante esto, el Ejército y la Marina alistan a mil 200 efectivos para reforzar la seguridad, según las fuentes.